Un estudio indica que las personas con sobrepeso que hacen actividad física regular tienen un riesgo similar de desarrollar enfermedades del corazón que las personas de peso normal que son sedentarias.
Es conocido que la obesidad es perjudicial para la salud, pero estudios recientes indican que las consecuencias de no hacer ejercicio físico pueden ser tan graves como el exceso de peso.
La actividad física, así como una buena alimentación y la adopción de un estilo de vida sana son conceptos que han ganado mucha relevancia en los últimos tiempos y todo indica que este cambio de actitud es mucho más que una simple moda pasajera.
Científicos e investigadores han estudiado seriamente qué pasa cuando no se hace ejercicio o cuando se come en exceso. Una de estas investigaciones fue publicada recientemente por el European Journal of Preventive Cardiology, y se basó en un estudio realizado con 5.344 personas de mediana edad y mayores residentes de Rotterdam, Holanda.
Tomando en cuenta la estatura, peso e índice de masa corporal de estas personas, fueron monitoreados sus hábitos de ejercicio y luego se analizó la información sobre las enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares del grupo.
Este estudio confirmó que el sobrepeso y la obesidad están estrechamente vinculados con el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Pero lo novedoso es que los resultados del estudio también concluyeron en que el índice de enfermedades cardíacas en las personas con sobrepeso que además se ejercitaban regularmente era similar al de las personas de peso normal que también se ejercitaban.
«Hemos llegado a la conclusión de que la inactividad física y la obesidad tienen un riesgo similar de desarrollar enfermedades del corazón«, dijo Klodian Dhana, investigador en epidemiología del departamento de nutrición de la Harvard T.H. Chan School of Public Health.
Es posible que los resultados de Rotterdam no puedan ser generalizados a otras localidades, ya que esta es una ciudad donde el promedio de actividad física de sus habitantes es significativamente elevado, en parte debido al uso generalizado de la bicicleta como medio de transporte. Sin embargo, es justo hacer notar que los investigadores incluyeron en su análisis todo tipo de actividad física.
Los resultados de este estudio confirman que, si bien el sobrepeso sigue siendo el principal factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardíacas, algunos de esos problemas pueden ser compensados con la actividad física.
La actividad física regular ayuda a fortalecer huesos y músculos, a reducir el estrés, a aumentar la energía y por cierto también a prevenir ciertas enfermedades. Hacer ejercicio ayuda también a mantener un peso corporal saludable.
Esta investigación muestra también que nunca es tarde para comenzar a percibir los beneficios del ejercicio, por lo que es necesario tomar conciencia de las consecuencias de la inactividad física cuanto antes.
Fuentes: TIME Health